martes, 17 de agosto de 2010
"Jesus volcó en mi alma fortaleza y entusiasmo para actuar. " Santa Faustina Kowalska
"Haz contado demaciado contigo misma y muy poco conmigo"...
Santa Faustina nos invita a meditar con humildad
Antes de cada gracia muy grande mi alma es sometida a una prueba de paciencia, porque la siento pero no la poseo todavia. Mi espiritu se agita, pero la hora aun no ha llegado. Esos momentos son tan misteriosos que es dificil escribir sobre ellos.
13 IV 1937 Hoy tengo que permanecer todo el dia en la cama. Me ha dado una tos violenta que me ha debilitado tanto que no tengo fuerzas para caminar. Mi espiritu se lanza a cumplir las obras divinas, pero las fuerzas fisicas me han abandonado. En este momento no llego a comprender Tu actuar, Oh Señor, por eso repito con un acto de voluntad amorosa: Haz de mi lo que te agrade.
Al ver que las tentaciones son tan grandes, toda una oleada de dudas choca contra mi alma, el desaliento esta ya pronto y disponible, pero El Señor fortalece la voluntad contra la cual, como contra una roca se estrellan todas las acechanzas del enemigo. Veo cuanta gracia actual cooperante Dios me concede y con la cual me sostiene continuamente. Estoy muy debil y debo unicamente a la Gracia de Dios.
Cuando decici un dia, ejercitarme en cierta virtud, caí en el defecto contrario a dicha virtud diez veces mas que en otros dias. Por la noche mientras reflexionaba sobre porque hoy caía de manera exepcional? oí estas palabras; Haz contado demaciado contigo misma y muy poco Conmigo. Comprendí la causa de mis caídas. Diario 1048, 1087
El catorce de Abril me sentia tan mal que me levanté con esfuerzo para ir a la Santa Misa. Me sentia mas enferma que cuando me habian enviado la curacion. Tenia un fuerte estertor y una respiracion ronca en los pulmones y unos dolores extraños. Al recibir la Sagrada Comunion, yo misma no se porque, o mejor dicho que cosa me empujaba a esta oracion y comenzé a rezar de este modo: Jesus que Tu Sangre pura y sana circule en mi organismo enfermo, y que Tu Cuerpo Puro y Sano transforme mi cuerpo enfermo, y que una vida sana y fuerte palpite en mí, si es Tu Santa Voluntad que yo me ponga a esta obra, y esto sera para mi la señal evidente de Tu Santa Voluntad.
Mientras asi rezaba, subitamente sentí como una sacudida en todo el organismo y de repente me sentí completamente sana. Tenia lña respiracion limpia como si nunca hubiera estado enferma de los pulmones ni sentía dolores y para mi era la señal de que debia ponerme a la obra.
Jesus volcó en mi alma fortaleza y entusiasmo para actuar. Ahora comprendo que si El Señor exige algo del alma, le da la posibilidad de realizarlo y a traves de la gracia la hace capaz de cumplir lo que de ella exige. Diario 1089- 1090
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Dios quiera que todos los católicos se entregasen como la Santa Faustina, dando un buen testimonio de Jesucristo. la FÉ todo lo puede.
ResponderEliminarUN SERVIDOR CREYENTE.