sábado, 23 de enero de 2010

Dios quiere que nos Sacerquemos a Él orando sin cesar, Quiere que demos amor y perdón a otros, como Él nos lo da a nosotros.


El mensaje de la misericordia es que Dios nos ama, nos ama a todos, sin importar la magnitud de nuestros pecados. Dios quiere que reconozcamos que Su misericordia es más grande que nuestros pecados, para que podamos invocarlo a Él con confianza, recibir Su misericordia y dejar que ésta fluya a través de nosotros hacia los demás. Así, todos llegarán a compartir Su alegría.
¡Abre, Señor, nuestros corazones!, para que comprendamos las palabras de tu Hijo.

Oremos:
Señor, Dios Nuestro,
Hoy nos postramos ante tí en oracion, Pidiendote por todos Nuestros Hermanos mas necesitados, especialmente los hermanos de Haití,
Que de tus rayos Divinos se nos irradien tu amor y tu gracia para que seamos capaces de abrir nuestro corazón a tu Divina Voluntad.
Que con la palabra, la acción y la oración difundamos a todos nuestros hermanos el Amor Misericordioso del Padre.
Que podamos vivir en nuestra propia vida la experiencia salvadora de la Misericordia nacida en la Pasión, muerte y Resurección de Tu Hijo Jesús
Queremos que el mundo entero se renueve a la luz de Tu Misericordia y así, transformados en disípulos y misioneros, Tu amor sea conocido, anunciado y proclamado en esta parte del mundo.
Santa Maria Faustina ayúdanos con tu intercección a prepararnos para estos momentos de Gracia, queremos imitarte siendo incansables Apóstoles de La Misericordia Infinita. Amén.

Meditacion con Santa Faustina Apóstol de la Misericordia en Vida y después de la muerte, "el instrumento elegido", por Dios.

Su vida no se distinguió por singularidad, sino mas bien por la soledad, y casi desgarrada de toda afección humana. Fue víctima ofrecida por los pecadores, y en medio de sus fortísimos dolores dolores, ofrecía sus sufrimientos para la salvación de las almas. Podemos decir que nos ha ayudado a llenar el vacío de nuestras vidas con la inconmensurable Misericordia Divina. Santa Faustina nos ha acercado al derroche de La Misericordia de Dios.
Tuvo tantas visiones de Jesús, por eso El la confirma como Profeta y le dice: "En el antiguo testamento enviaba a mi pueblo con rayos y centellas, hoy te envío a ti con mi Misericordia". Y Jesús le dió la gracia de tocar los corazones con sus palabras
y que le abrieran las puertas de los corazones de los pecadores más empedernidos. Fué un alma seráfica, de las que Dios exige que lo amen mas que las otras, y se hizo víctima en favor de los pecadores.
Quizas nadie como Santa Faustina ha acercado el cielo de los Ángeles al hombre terrestre, porque trataba con los querubines, ángeles y serafines, y ella lo escribía tan fácilmente que asombre.

Su Diario
Está hecho con palabras de ella y de Jesús, y son fuertes y firmes como piedras, donde vemos en cada palabra el sello del amor exclusivo de dios. Que no se borren las palabras, ni aún en los acentos. Ella daba gran importancia al amor de Dios y siempre que escribía cartas con el Padre Sopocko le decía: "Padre, le deseo un gran amor de Dios, porque es lo único que tiene importancia en la vida de cada persona."

Meditemos esta oración en un momento de silencio.

Dios, Padre Misericordioso que has revelado tu amor en Tu Hijo Jesucristo y lo has derramado sobre nosotros en el Espiritu Santo, consolador, te encomendamos hoy el destino del mundo y de todo hombre. Inclinate hacia nosotros, pecadores; sana nuestras debilidades; derrota todo mal; haz que todos los habitantes de la tierra experimenten Tu Misericordia para que en Ti, Dios Uno Y Trino, encuentren siempre la fuente de la esperanza.
Padre Eterno, por La Dolorosa Pasión y Resurrección de Tu Hijo, ten Misericordia de nosotros y del mundo entero.
Amén. Juan Pablo II

Cancion dedicada a Santa Faustina


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